Entradas más visitadas

Seguidores

lunes, 28 de febrero de 2011

ese Enero


Estaba siendo un Febrero de los de 20 grados, luz anaranjada y nubecitas flotando, pero se ha vuelto del revés, ha vuelto ese invierno con un frío que corta los labios, con un cielo gris oscuro que está apunto de romper a llorar y con esos copos de nieve que me hacen compañía. He vuelto otra vez a ese asqueroso Enero, ese Enero donde me dí cuenta de que te había perdido y que ya no había vuelta atrás, ese Enero donde veía tus fotos una y otra vez para sentirte más cerca, ese Enero donde descubrí que tenías un lunar en el cuello que nunca podría ver más de cerca, ese Enero donde me imaginé mil millones de situaciones donde te volviera a ver, ese Enero donde los Reyes me trajeron un puñado de sueños rotos, ese Enero donde mis lágrimas acompañaban a la lluvia, ese Enero donde el frío era el único capaz de calmar mis ansias por salir a buscarte y volver todo al revés. Ese Enero donde me prometí dejar de quererte.

domingo, 27 de febrero de 2011

dicen que hay trenes que solo pasan una vez


A veces me sorprende lo idiota que puedo llegar a ser, la de oportunidades que desaproveché por miedo, la de cosas que se quedaron en mi boca sin encontrar una salida.
Ha tenido que pasar todo este tiempo, todos estos meses para que me diera cuenta de que lo perdí todo, lo perdí por tonta, en teoría por esperar a tener las cosas claras, pero tanto aclarar las cosas no han hecho más que dejara escapar esta oportunidad. Me siento idiota de estar aquí, sentada, viendo como te escapas sin que pueda hacer nada, viendo como todos mis sueños se los lleva otra, otra que los va a hacer realidad.
Me da envidia, pero sobre todo rabia, rabia por pensar tanto las cosas, rabia por dar prioridad a mi cabeza, rabia por haberte dejado escapar. Ahora no puedo hacer nada, solo puedo resignarme, agachar la cabeza y saludarte con un simple hola, tratar de enterrar todo esto y volver a ser feliz.
Dicen que hay trenes que sólo pasan una vez, y que si no te subes cuando pasan por delante de ti, nunca más podrás hacerlo, hoy he aprendido eso, he aprendido a no volver a desaprovechar las oportunidades, por pequeñitas que sean, que se me pongan por delante.

me resisto a pensar que ya no tengo motivos para seguir queriéndote.


Nunca nadie me había hecho sentir así, nadie había conseguido que pensara en él al despertarme todos los días durante cinco meses. Lo he intentado de todas maneras posibles, por activa y por pasiva, del derecho y del revés, te prometo que lo intentado millones de veces, pero no lo he conseguido.
No he conseguido olvidar tu risa, el marrón intenso de tus ojos o el olor a naranja de desprendías. Pero creo que ya sé por qué no lo he conseguido, no lo he hecho porque me resisto a pensar que todo ya se ha terminado, que voy a tener que dejar de sonreír y de llorar por tu culpa, que ya se han agotado esas tardes que deseaban que se convirtieran en infinitas y que esas conversaciones interminables donde no sabíamos que más decirnos el uno al otro tenían fecha de caducidad, simplemente porque me resisto a pensar que ya no tengo motivos para seguir queriéndote.

viernes, 25 de febrero de 2011

porque moriría pensando....


Me encantaría vendarte los ojos con un pañuelo y llevarte a Barajas, coger el primer vuelo que salga a un país de esos que tienen un nombre impronunciable y subirnos a ese avión, sin que me importe si lo que hago está bien o mal.
Me encantaría ver como mis problemas, mis dudas, mi culpabilidad por quererte, el secreto que llevo guardando desde meses, se van haciendo pequeñitos, cada vez más inapreciables, para quedarse escondidos en otra ciudad, en otro país, casi que en otro mundo.
Me encantaría que me cogieras de la mano, que me dijeras que estoy loca, que eso no está bien o que no va funcionar, porque simplemente mi respuesta sería callarte la boca con un beso. Y en ese momento, aunque ese avión se estrellara, aunque supiera que me quedaban unos segundos de vida, sería extremadamente feliz, porque moriría pensando que el resto de mi vida la iba a pasar junto a ti.

miércoles, 23 de febrero de 2011

Porque aunque no nos guste...

                                         



Hay episodios de nuestra vida que queremos que acaben lo antes posibles, que queremos olvidar o como mucho guardarlos en un cajón escondido de nuestra memoria y tirar la llave a un río. En cambio otros, no queremos que acaben jamás, queremos vivir por siempre en esas situaciones que ahora sólo son momentos convertidos en hielo que están en mi memoria, queremos quedarnos paralizados, disfrutando al máximo de aquello.
Pero si somos realistas, nos damos cuenta que no existe una máquina del tiempo que nos haga ir al pasado para volver a esos momentos tan maravillosos o una que nos lleve al futuro para olvidar lo antes posible eso que tanto daño nos ha hecho.
Si algo he aprendido en la vida es que hay que enfrentarse a las cosas malas, plantarles cara y vencerlas, y las buenas, disfrutarlas a cada segundo, al máximo, porque por desgracia o por ventaja, todo se  termina acabando.

lunes, 21 de febrero de 2011

dicen que lo prometido es deuda



Dicen que lo prometido es deuda, en ese caso me debes tantas cosas. 
Me prometiste un para siempre, me prometiste ese hueco que tienes entre el pecho y el cuello donde me siento en casa, me prometiste te quieros que ahora sé que no significan nada, me prometiste palabras que ahora son sólo papel mojado, me prometiste un lo siento cuando te equivocarás que todavía estoy esperando, me prometiste la verdad, que ahora sé que eran palabras disfrazadas de verdades a medias, me prometiste estabilidad pero cada día contigo mi vida daba un vuelco de 360º, me prometiste tantas cosas que hoy sigo haciendo memoria.
Supongo que la ingenua soy yo, por no saber desde el principio que todo eso no valía nada, que eran palabras dichas por el momento, y que ahora simplemente, me siguen haciendo daño.

domingo, 20 de febrero de 2011

Con un final de los de colorín colorado


Quiero reírme hasta rabiar, llorar de felicidad, emborracharme de amor, y fumarme los te quieros.
Quiero vivir en un cuento de hadas, con un final de los de colorín colorado, con fresas para desayunar y con margaritas en la mesita de noche al acostarme.
Quiero darme un paseo por la cabeza de los demás, saber lo que piensan, conocer porque hacen lo hacen, descubrir si son felices, saber si les hago feliz.
Quiero elegir lo que sueño por la noche y al despertarme que esos sueños cobren vida.
Quiero desbordar imaginación con fantasías irrealizables.
Quiero que cada día sea nuevo, distinto al de mañana y mejor que el anterior.
Quiero todo eso, pero sobre todo lo que quiero es ser feliz.

sábado, 19 de febrero de 2011

sé que no....

Te he olvidado


Porque hoy me he dado cuenta de que sólo te habré olvidado cuando deje de decir que te he olvidado.

viernes, 18 de febrero de 2011

está esperando que tú llegues un día y que todo vuelva a ser como antes


Incandescente, valiente, rebosante de felicidad, así estaba, como una vela recién encendida que luce con vitalidad. Ese conjunto de cosas me obligaba a cerrar los ojos cuando te acercabas a decirme algo al oído, a bajarte la mirada cuando tus ojos se clavaban como puñales, a temblar cuando tu mano se posaba en mi cintura, a emitir una sonrisa temerosa ante preguntas indiscretas, o a llevar esa sonrisa dibujada en la cara de vuelta a casa, a estar embriagada de fantasías, que tenía la certeza de que cobrarían vida.
Hoy por hoy, esa llama está latente, sin vida, temerosa y cargada de frustración, pero no se ha apagado, sigue ahí, pequeña, casi imperceptible, porque está esperando que llegue de nuevo esa cerilla que la enciende, está esperando ese soplo de aire que la haga alumbrar de nuevo, está esperando que tú llegues un día y que todo vuelva a ser como antes.

martes, 15 de febrero de 2011

simplemente se acabó


                                    
Se acabó mirarme en el espejo y solo verte a ti, se acabó no dormirme hasta las dos dando vueltas en la cama, se acabó que seas lo primero en lo que pienso cuando suena el despertador, se acabó que espere impaciente volver a verte, se acabó mirar por detrás de mí en la calle por si diera la casualidad de que estabas ahí, se acabó el llevar una sonrisa estúpida dibujada en la cara, se acabó buscarte los días que salgo en cada sitio al que voy, se acabó buscarte una y otra vez en la agenda del móvil o del ordenador, se acabó esperar que la próxima vez que te vea fuera distinta a la última, se acabó ir llorando por los rincones y ponerle buena cara a la gente, se acabó que cuando me pregunten ¿qué te pasa?, responda nada y la gente se lo crea, y se acabó sentirme rabiosa, sin ni siquiera saber porque  y dar patadas al aire, mientras pienso en ti sin decírselo a nadie, se acabó todo eso…¿pero sabes que no se acabó? No se acabó ser feliz.

lunes, 14 de febrero de 2011

Los sueños son quienes nos abren los ojos


Cuando cerramos los ojos y nos empezamos a dormir, nuestro subconsciente se relaja, y al caer en ese sueño profundo, este libera sus pensamientos, sus recuerdos, sus sensaciones. Mientras soñamos, a veces tenemos la sensación de estar haciéndolo, unos sueños parecen tan reales que dan miedo, otros hacen que te sientas tan feliz al despertarte que deseas no haberlo hecho y que eso hubiera pasado de verdad, otros te asustan tanto que tienes que incorporarte y respirar y tratas de olvidarlo sin éxito, unos hacen que rías hasta rabiar, otros que llores desconsoladamente..
La gente dice que los sueños no son nada, que son solo imágenes, en su mayoría sin sentido que pasean por nuestra mente y que a la mayor parte de ellos ni los recordamos.
Pero creo que no, creo que los sueños nos desvelan secretos de nosotros mismos, nos ayudan a entender ciertas cosas, hacen que nos demos cuenta de que pasa en realidad, algunos nos hacen ser tan felices, otros llorar. Pero curiosamente, mientras dormimos, los sueños son quienes nos abren los ojos.

Supongo que tengo demasiadas ideas en mi cabeza


No sé por qué escribo, no sé por qué cojo el ordenador o un papel y me vienen un torbellino de ideas, a veces sin sentido o a veces cargadas de sentimientos, no sé por qué. Supongo que es porque tengo demasiadas ideas en mi cabeza, demasiados sentimientos o sensaciones que necesitan una vía de escape, y también supongo que ésta es la más fácil. No todo lo que se siente o lo que se piensa se puede decir, hay cosas que es mejor guardarlas para uno mismo, cosas inconfesables, cosas que incluso nosotros mismos tratamos de negarnos, pero yo no puedo retenerlas, son muchas, demasiadas, así que las escribo, las convierto en pequeñas frases con un sentido abstracto que hacen que por lo menos me sienta liberada.

¿Sabes? :)

Yo sólo iría al aeropuerto contigo para coger un avión y llegar a una playa perdida y comernos a besos, hasta que me olvide de qué día es y me vuelva loca de tanto quererte.

domingo, 13 de febrero de 2011

❤ ❤ ❤


¿Sabes qué? Que hoy estudiando, he visto en el margen de un cuaderno tres corazoncitos pintados y me acuerdo perfectamente de cuándo los dibuje, de lo que pensaba, lo que sentía. Y es entonces cuando me he preguntado cómo es posible que tú solito hayas hecho desaparecer ese conjunto de sensaciones tan maravillosas.

Seguí andando hacia delante

Te vi, fue sólo un instante pero te vi, estabas ahí, riéndote. Había esperado ese momento ni sé el tiempo, había imaginado como sería encontrarme contigo después de tanto tiempo millones de veces, había imaginado como iba corriendo y te abrazaba o como me acercaba tímidamente y te preguntaba ¿qué tal?. Pero mi reacción fue distinta a todas aquellas, te ignoré, hice como si no te hubiera visto y torcí la calle sin más, por un momento me negué a mi misma que estabas ahí, me traté de convencer de que tan solo eras una alucinación. Así que anduve, anduve rápido, con las piernas temblorosas y cuando llegué al final de la calle, me arrepentí, no te niego que tuve la tentación de volver, de correr hacía a ti, y de decirte de una vez por todas la verdad, esa que me he estado callando desde hace meses, pero creo que me pudo la cobardía y simplemente seguí andando hacia delante.

sábado, 12 de febrero de 2011

Sólo porque ha sonado nuestra canción



Ha vuelto, ha vuelto esa sensación horrible, esa sensación que no me deja respirar y que ahoga mis palabras con un suspiro, esa sensación que hace brotar dos manantiales de mis ojos a cada momento o que obvia mis sonrisas y que ocupa cada espacio, por insignificante que sea, de mi mente.
Pensaba que lo había conseguido, que había podido acabar con ella, y que la había hecho desaparecer hace tiempo, no sé cómo, pero se fue, se fue con el agua de la ducha, con el sol que empezaba a salir, o tal vez yo misma la hice desaparecer para poder vivir feliz. Pero hoy ha vuelto, ha vuelto para acompañarme, para amargarme otra vez y ha vuelto tan solo porque ha sonado esa canción.

viernes, 11 de febrero de 2011

Yo andaré cerca por si vuelves esas palabras a decir ♥

Igual que “entonces” era “siempre” ,lo que dejaste sigue aquí.
Todos los sitios, los Diciembres, están donde los escondí.
Las cosas pierden su sentido, si no me llevan hasta ti.
Y no te miento cuando digo que tu mirada sigue aquí,
Que algunas noches me recuerdes, que no me dejes de sentir.
Yo andaré cerca por si vuelves esas palabras a decir.

Me siguen haciendo sonreir


¿Sabes qué?, que eres el protagonista de mi espejo, que conoce tu nombre a la perfección, que me ha visto sonreír por tu culpa millones de veces. Todos los días al salir de la ducha escribo tu nombre con mi dedo en el vaho del espejo y a su lado siempre le acompaña un corazón. Ese corazón en un principio representaba ilusión, intriga, miedo, pero ahora ese corazón desaparece cada vez más rápido y es más pequeño, ahora muestra el dolor, la tristeza y esos millones de recuerdos que me quedan, y que aunque no me guste, me siguen haciendo sonreír.

Pues Simplemete para ser feliz




Ahora no soy nada, mi vida se resume en un 
conjunto de ilusiones empapadas en un clínex mojado de la mesilla de noche, de sueños que resbalan por mi cara en forma de gota, y que se van haciendo pequeños hasta desaparecer, de recuerdos que mis sollozos intentan hacer salir, pero que mis ojos se cierran para evitarlo, de dolor que hace que me encoja en la cama, de rabia que se me acumula en la garganta y sale en forma de gritos.
Y todo ¿para qué?, ¿para esto?,¿ para acabar así tirada en la cama, tomando la posición esa que tanto he criticado sobre gente que no tiene la valentía de levantarse cuando los tiran?, pues no, se acabó, voy a tirar esos clínex a la basura, voy a mojar mis lagrimas bajo la ducha, voy a arrancarme ese dolor con maquillaje y voy a convertir esos gritos en música, y ¿para qué?, pues simplemente para ser feliz.

miércoles, 9 de febrero de 2011



Hoy ha sonado esa canción que me obliga a recordarte, y sin darme cuenta he vuelto a pensar en ti.

martes, 8 de febrero de 2011

Eso es lo único que quiero ♥


¿Sabes? hoy me he dado cuenta de que las cosas ya no son como antes, y también me he dado cuenta de que no van a volver otra vez a ese principio en que tanto me gustaban. No sé exactamente cuándo ha pasado esto, ni por qué, ni siquiera sé si la culpa la tengo yo, tú o el tiempo, y por eso busco un culpable de que tú y yo, ahora mismo estemos congelados en el tiempo, retenidos en meros recuerdos insignificantes que me hacen sonreír, no sé que ha pasado, lo único que sé es por qué me he dado cuenta. Me he dado cuenta porque cuando volvía a casa y he notado ese aire cálido de finales de Febrero en la cara, no me he sentido feliz como de costumbre, porque cuando esos últimos rayos de sol del día me daban en los ojos, no los he cerrado y he pensado que estábamos en la playa y porque me he dado cuenta que la sensación que llevaba a casa de esa tarde era diferente a las anteriores. Solo quiero que todo vuelva a ser como antes, quiero volver a sonreír y tener mil historietas que contar al día siguiente, quiero verte y temblar y luego quiero cerrar los ojos y sentirme absurda por las mil contestaciones sin sentido que te he dado y quiero ponerme a estudiar y que lo único que recuerde mi cabeza sean esos momentos contigo, sí, eso es lo único que quiero.

lunes, 7 de febrero de 2011

lucha por olvidar esa poca cordura que parece que le queda a mi memoria


Estoy empeñada en que las cosas vuelvan a ser como antes, tan empeñada estoy, que sobrevaloro cualquier estupidez, que cualquier frase hecha me hace sentir feliz, que cualquier roce contigo hace que convierta esa locura en una supuesta lucidez. Estoy otra vez como al principio, feliz, extrañamente feliz, tan feliz que me doy miedo, porque sé que esa felicidad ficticia se va a trasformar en un conjunto de lágrimas resbalando por mi cara, porque sé que me voy a caer de bruces al suelo, que voy a volver a meterme por la noche en la cama llorando y que cerraré los ojos y te veré, ahí, conmigo, y volveré a sentir esa sensación estúpida y esperanzadora de que ese suceso imaginario cobre vida. Ojala yo misma me hiciera entender la locura que estoy cometiendo, pero supongo que aunque algo dentro de mí lo sabe, otro algo lucha por olvidar esa poca cordura que parece que le queda a mi memoria.

sábado, 5 de febrero de 2011

Suprimir

Es cierto, me encantaría que nuestra memoria tuviera un botón que pusiera “suprimir”, algo que al presionarlo hiciera que olvidáramos todo aquello que nos atormenta, que nos persigue a cada momento o que no nos deja dormir por la noche. Un botón que cuando se pulsara nos dejara en un mundo más feliz, en un mundo donde todos los recuerdos sean buenos, donde no quepa el dolor, el miedo o la tristeza. Un mundo donde todo el mundo pueda vivir su propia vida sabiendo que si ocurre algo que quiera olvidar lo puede borrar de sus recuerdos, donde se pueda ir por la calle sin temer nada, sin pensar en aquello, un mundo único, propio, uno distinto para cada uno pero seleccionado a nuestra manera.

Pero eso sí, no pasa nada por intentarlo.


Y cuando crees que es imposible que todo vuelva a ser como antes, ocurre, vuelves a las andadas, a un camino ya recorrido, que te es conocido y que te gusta, pero no es igual que antes.
Cuando volvemos sobre nuestros pasos pretendemos encontrarnos las cosas tal y como estaban antes de que nos fuéramos, pero eso es imposible, el tiempo ha pasado y ha hecho su trabajo, ha hecho que unas cosas se olviden y que otras las recuerdes para siempre.
Cuando regresamos a atrás, tenemos que hacerlo llevándonos todo lo que trajimos con nosotros, lo bueno y lo malo, pero no podemos pretender pasar dos veces por el mismo lado y que todo siga siendo igual, y por más que nos duela, sabemos que lo que antes estaba, lo que teníamos, se ha ido, y también sabemos que, aunque lo busquemos, tal vez, será imposible recuperarlo, por más que luchemos, pero eso sí, no pasa nada por intentarlo.

Y que esa esperanza que ya se ha ido vuelva para abandonarme otra vez.



Creo que te estoy olvidando, sí así es, me ha costado mucho pero por fin lo estoy consiguiendo, estoy olvidando tu risa, el color de tus ojos, tu mirada intensa, tu pelo alborotado, lo que me hacías sentir, estoy olvidando todo. Hoy me he dado cuenta de que solo he pensado en ti cuando me he despertado, he sentido algo horrible en el estómago algo que quiero olvidar, pero no he vuelto a hacerlo, antes no podía escribir dos líneas sin quitar la vista del papel y sonreír, no podía leer un párrafo o estudiar porque pensaba en ti, ponía una canción y dijera lo que dijera me recordaba a ti. Por fin, después de tanto tiempo lo estoy consiguiendo, pero sé que este logro va a durar poco, tan poco como hasta que llegue mañana y te vuelva a ver, entonces con una mirada insignificante, con una frase hecha o con dos palabras sin importancia harás que todo vuelva de nuevo y que esa esperanza que ya se ha ido vuelva para abandonarme otra vez.

jueves, 3 de febrero de 2011

Un mundo donde estemos tú y yo, y lo demás nos sobre. :)



Quiero vivir en un mundo donde hoy sea mañana, donde la curiosidad pueda al miedo, donde el verbo poder esté en todas nuestras frases. Quiero vivir en un mundo donde sea incomprensible acostarse sin estar tú al lado, donde las tazas de café se pidan por parejas, donde tomar el sol en la playa sea la rutina. Quiero vivir en un mundo donde se sueñe despierto y al despertarse los sueños se hagan realidad, donde sea fácil decir las cosas, donde no busquemos la vuelta a todo. Quiero vivir en un mundo donde la gente sea feliz, donde reine la igualdad y el amor, donde en las noticias no digan las cosas malas que ocurren sino todo lo bueno que está por venir. Quiero vivir en un mundo donde el espejo no diga las verdades, donde los demás hagan de nosotros mismos, donde no exista la falsedad. Quiero vivir en un mundo perfecto, utópico, un mundo donde estemos tú y yo y todo lo demás nos sobre.

Mírame



Hay miradas que no dicen nada, miradas que lo dicen todo, miradas que esconden secretos, miradas que dicen te quiero, miradas que piden que des un beso, miradas que hace que te apiades de ellas, miradas que enamoran, miradas que conmueven, miradas que hacen que te vuelvas loco, miradas que atormentan, miradas que castigan, miradas que  hacen daño, miradas que se clavan, miradas que duelen, miradas tristes o miradas llenas de felicidad, miradas que olvidarás al cabo de un segundo o miradas que no olvidarás mientras vivas.
No sé exactamente cual es la mirada que más me gusta de ti, las tienes todas, alguna me habrá enamorado, otras han hecho que te odie, una me hizo volver loca, otra me hizo ver que no podía vivir sin ti.
Hay millones de miradas, todas distintas, propias, con personalidad, irrepetibles, algunas inolvidables, pero las miradas que más me gustan son aquellas que lo dicen todo sin decir nada.